Título original: Inner Ghosts
Año: 2018
Duración: 90 min.
País: Portugal
Director: Paulo Leite
Guión: Paulo Leite
Música: Miguel Cordeiro
Fotografía: Miguel Sales Lopes
Reparto: Celia Williams, Elizabeth Bochmann, Iris Cayatte, Norman MacCallum, Amanda Booth, Patricia Godinho, Joao Blümel
Una vuelta de tuerca al cine de posesiones.
Es sabido por todos los amantes del cine de terror que dentro del género, los exorcismos así como todo lo que implica espíritus o posesiones son una de las ramas más explotadas, pero incluso con éste hándicap volvemos y repetimos al cine una vez tras otra, ya sea de la mano de una de las sagas más conocidas o de cómo en este caso el de una ópera prima. ¿Por qué? Está claro, y aunque ya somos mayorcitos, nos seguimos asustando de lo que no podemos ver y de lo que conocemos suficiente por películas, novelas e historietas de campamento como para no poder asegurar que no hay nada más en el rincón más oscuro de la habitación.
Una reputada científica y catedrática de la universidad posee además un don, con él es capaz de advertir presencias sobrenaturales así como contactar con el más allá. La tesis con la que está trabajando le hará cruzar líneas que como médium nunca antes había cruzado. ¿Será capaz ésta reputada catedrática de tener todo bajo control?
El máximo responsable tras éste trabajo es el guionista y ahora también director Paulo Leite, un fanático del género de terror que ha decidido incorporar como avancé en el titular inicial un nuevo elemento al cine de espiritismo en su primera película en la dirección, aunque pueda parecer imposible dado la gran explotación del género, éste emprendedor de origen brasileño y con residencia en Portugal ha decidido añadir a la trama una máquina para poder contactar con el más allá, pero lo realmente novedoso es como dan con ella, no entraré en profundidad al tema para evitar spoilers, pero como novedad ya tenéis sobre la mesa un elemento por el que visionar el film si sois unos auténticos cafeteros de lo sobrenatural.
Además de este elemento diferenciador y aunque en cierta manera suene totalmente descabellado, es una película con la estructura muy definida donde la mejor parte es la que tiene las erratas más grandes y a la vez las partes que resultan más estables o equilibradas son las que no terminan de aportar nada, me explico, el arranque del film o la introducción es meramente un trámite donde presentar a los personajes, en especial a la protagonista. La actriz principal Celia Williams que encarna a la profesora Helen y a quién le acompañará durante parte del film la actriz Elizabeth Bochmann, y es que en este caso las mujeres son las verdaderas protagonistas.
El desarrollo incorpora algunos elementos que parecen una extensión de la primera parte, aunque a mí entender no explota suficiente bien un personaje que será clave en la parte final del film y este hecho se arrastrará hacia la conclusión final, la que como he dicho, es la mejor pero en la que más errores podemos encontrar.
El fin, esa explosión, y en este caso lo es, donde se abre toda la trama para mostrar los mejores efectos prácticos y protésicos a la vez que se cruzan los mundos entre vivos y muertos añadiendo así los elementos más terroríficos, no obstante con el gazapo de guion más destacable en uno de los personajes utilizados para desencadenar los acontecimientos, con actitudes, pistola en mano, que cuestan de creer.
Puedo imaginar que los que sufren ataques epilépticos no estarán muy de acuerdo conmigo por motivos obvios, pero valoro como lo mejor de todo la parte final del film donde el caos ya se ha desatado y el mejor "espectro" de la película se convierte en el absoluto protagonista indiscutible. El hilo conductor con el que todo encaja a la perfección es el recurso de la luz estroboscópica, es decir, intensos flashes de luz que van dejando entrever la situación hacia la que va a derivar el remate final de la historia.
Firma: Gerard FM.
@tmagerard
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