Possum review


Phillip, un artista de marionetas caído en desgracia, vuelve a su hogar para enfrentarse a su malvado padrastro y a los terribles secretos que han torturado toda su vida. En su locura ha de hacer frente a una de sus obsesiones, una horrible marioneta con forma de araña llamada Possum.

Título original: Possum

Año: 2018

Duración: 85 min.

País: Reino Unido

Director: Matthew Holness

Guion: Matthew Holness

Música: The Radiophonic Workshop

Fotografía: Kit Fraser

Reparto: Sean Harris, Alun Armstrong


Viaje al subconsciente más terrorífico.

Cuando nos adentramos de lleno en una película dónde lo onírico tiene una fuerza inusitada, pueden pasar varias cosas. La primera es que entremos de lleno en la historia, lo cual nos puede llevar por caminos tenebrosos dejándonos mal cuerpo, pero con la satisfacción de haber disfrutado de un gran momento de cine. Otra que podría suceder es que desde el minuto uno estemos esperando aquello que llamamos acción y nos quedemos con un palmo de narices, eso nos llevará, en el caso de que la lleguemos a acabar, a una gran frustración. La última de las cosas que se me ocurren es que la miremos con aquello que llamamos “ojo clínico”, desgranando y descubriendo los muchos atractivos que guarda dentro de sí.


A caballo entre la primera y la tercera de las opciones, Possum nos ha parecido muy interesante. Vamos a nombrar los motivos: El primero de ellos es la excelente escenografía que se mueve en unos escenarios que por calificarlos de alguna manera serían terroríficos, ideales, por otra parte, para adentrarse en un mundo de pesadilla que ronda la mente del protagonista y que tienen cierto aire de expresionismo alemán. Otra cosa que engrandece el film es la música, a cargo de la experimental The Radiophonic Workshop, atizándonos continuamente como un martillo pilón.

Phillip, un artista de marionetas caído en desgracia, vuelve a su hogar para enfrentarse a su malvado padrastro y a los terribles secretos que han torturado toda su vida. En su locura ha de hacer frente a una de sus obsesiones, una horrible marioneta con forma de araña llamada Possum.

Matthew Holness hace su debut en el largometraje con este film, si bien su carrera se ha desarrollado mayoritariamente como actor de cine y televisión. Hacer un estreno con un film de este tipo tiene su mérito, pues no duda y valga la redundancia, en jugarse el tipo con una historia llena de angustia y que tiene total ausencia de algo simpático o, como menos, un toque de humor. La ausencia de cualquier tipo de concesión al espectador la hace algo dura, aunque juega sabiamente con un acertado ritmo apoyándose en las dos patas que hemos nombrado con anterioridad. Acercarse demasiado a Freud tiene sus riesgos, entre ellos la escasa comercialidad que atesora y que la convierte en un rara avis dentro del género de terror.


Las interpretaciones rápidamente las tenemos explicadas puesto que, salvo alguna aparición ocasional, dos son los actores protagonistas. Para empezar un excelente Sean Harris (Misión Imposible: FalloutMisión Imposible: Nación Secreta), en un papel algo dificultoso de interpretar pero del cual sale muy airoso. Le secunda de manera muy acertada Alun Armtrong (The Mummy ReturnsVan Helsing).

Possum es de aquellas cintas para mirar con curiosidad. Encierra atractivos que para salir a la superficie necesitan de la complicidad del espectador, el cual ha de estar preparado para algo en cierta manera vanguardista que si entra bien hará disfrutar a todo aquel que se atreva a su visionado.

Firma: Josep M. Luzán.
@Josep_Luzan