Pedro Cristiani debuta con la perturbadora 'Deus Irae'

Los amantes del terror ya pueden ir preparando en su apretada agenda un hueco para el que será, sin duda, uno de los bombazos del 2019. Estamos hablando de Deus Irae cuya autoría recae en Pedro Cristiani. Nuestro despego de la nostalgia hace que dirijamos nuestra mirada a futuras producciones que, a nuestro entender, marcarán el próximo año cinematográfico.

Los ciclos parece que no solo suceden en el apasionante mundo de la economía. El terror también se apropia de ellos. Como muestra la numerosa aparición de films de exorcismos que últimamente llena las pantallas. Pero una cosa es rodar una cinta que, queramos o no, acabará pareciéndose a la obra maestra El Exorcista (The Exorcist. William Friedkin, 1973) y otra muy distinta adentrarse en los más profundo de esa liturgia con el aliciente añadido de no saber dónde empieza o acaba el Mal, por la naturaleza principalmente de los encargados de llevarla a cabo. Esa frescura y, como contrapunto, oscura manera de presentarnos algo, los exorcismos, tan viejo como el cristianismo, nos lleva a situar en un mismo plano el Bien y el Mal. La alegórica lucha entre ambos tiene la misma edad que el mundo. La pregunta es ¿vale todo para que la parte más bondadosa acabe triunfando?

Pedro Cristiani ya nos ofreció, allá por el 2010, un cortometraje con el mismo nombre y que nos dejó con la boca abierta. El tiempo transcurrido entre ambos trabajos no ha hecho más que enfatizar y acabar de explicarnos que los Deus Irae son los herejes imprescindibles, aquellos que por implacables ejecutores no dejan de ser menos deseados. Son los monstruos que exterminan a los monstruos, aquellos que necesitan para lograr sus objetivos volverse algo mucho peor que aquel Mal que quieren destruir. ¿Cuánto de tu propia humanidad estás dispuesto a sacrificar para vencer al Demonio?

Toda esta apasionante temática viene acompañada, como su predecesora, con unas impactantes imágenes llenas de gore y escenas truculentas que hace que desde ya empecemos a removernos en nuestros cómodos asientos. Desde Argentina nos llega el más puro terror, en esta ocasión, vestido con sotana y con bastante mala baba.

El elenco está compuesto por Pablo Ragoni, Sabrina Macchi, Karina Antonelli, Lucía Adúriz y el enigmático Jorge Prado. Gastón Ricaud es el único rostro que se mantiene del cortometraje original, representando a un Padre Marcos ya desgastado y aún más brutal en sus métodos de exorcismo.

Tenemos buenas noticias para los impacientes. Podréis degustar el cortometraje del 2010 que os hemos comentado.

Estamos ante un reto apasionante llevado a cabo por un director que ya nos sorprendió a todos en la edición del 2011 del Festival de Cine de Terror de Molins de Rei, en la cual consiguió el Premio del Público. Una credencial que hace que estemos muy atentos en su paso al competitivo mundo del largometraje.