Sadako 3D 2 review


Título original: Sadako 3D 2

Año: 2013

Duración: 96 min.

País: Japón

Director: Tsutomu Hanabusa

Guión: Kôji Suzuki (Novela)

Música: Kenji Kawai

Reparto: Satomi Ishihara, Miori Takimoto, Kôji Seto, Yûsuke Yamamoto


Sadako sigue sin asustar.

En sus inicios esta saga tenía atemorizado a más de medio mundo, pero el tiempo y la saturación del j-horror no le han hecho un gran favor a Sadako. Su premisa inicial daba muy mal rollo, era algo nuevo y realmente te conseguía infundir terror como hacía años que no pasaba. Pero las nuevas tecnologías tanto aplicadas a su parte técnica, como a la trama del film, en sí, no le han sentado nada bien.

Si ya bien nos decepciono en su anterior film, el cual se suponía era un reboot adaptado a los nuevos tiempos que corren, esta segunda parte, sigue con su misma tónica, aportando una trama aun más enrevesada, totalmente innecesaria y alejándose de toda atmósfera terrorífica que la tan añorada The Ring provocaba en el publico.

Tras su intento fallido de conseguir un cuerpo en el que materializarse, Sadako no pierde esperanza y ahora, por medio de la pequeña Nagi, intentará volver a la vida. Fuuko Ando, es la encargada de cuidar de la pequeña Nagi, después que la madre de esta muriera en el parto. Pero pronto, Fuuko se dará cuenta que la niña a la que cuida tiene algo que ver con el incidente del "clip maldito" de hace 5 años... Parece ser que no es una simple niña huérfana y desvalida.

La dirección de Tsutomu Hanabusa, podríamos catalogarla de bastante continuista respecto a la anterior entrega de la saga. En cuanto al cambio de guionistas, ahora los responsables son Daisuke Hosaka y Noriaki Sugihara, lo único que han aportado a esta secuela es liar mucho más el argumento, personalmente prefería la sencillez de la saga original.

La película se rige en torno a dos situaciones de su protagonista, Kokoro Hirasawa en el papel de Nagi Ando. La pequeña en modo autista total, y su otra vertiente que la podemos apodar "modo mirada asesina", causante de mal rollos extremos. Ya sé que el gran maestro Alfred Hitchcock dijo "nunca se te ocurra hacer una película con animales, ni con niños, ni con Charles Laughton" pero no acababa de entender el por qué. Pues después de ver Sadako 3D 2 empiezo a entender lo de los niños. Cuando un personaje se mueve en dos únicos registros durante más de hora y media se convierte en algo tedioso.

Aunque el único problema no reside en la actuación de la pequeña, su otra protagonista Miori Takimoto o Fuuko Ando, como se la conoce en el film, se mueve a base de horchata. Su actuación adormece todo posible ritmo que pueda tener, y solo consigue despertar al espectador a base de sustos que no vienen al caso y que quedan totalmente como un gran pegote en pantalla.

En cuanto a la fotografía, sigue predominando en toda la cinta el azul, que por momentos transforman a la película, casi en una obra de teatro. Ese azul tan profundo en mi opinión, le hace perder bastante la tensión que podrían causar ciertas escenas, prescindiendo de esos focos. Aunque hay que admitir que es todo un sello distintivo que viene heredado de Sadako 3D.

Pese a tener un par de momentos bastante destacables, no son ni mucho menos suficientes como para alzar el film. Sadako 3D 2 no solo sigue el mal camino de su antecesora, sino que va más allá volviéndose aun más absurda y aburrida. Si quieres ver a niñas de pelos largos, mejor vuelve a la original de Hideo Nakata y aléjate todo lo que puedas de estas dos nuevas entregas.

Firma: Omar Parra.