TerrorMolins - Blood Star review

Bobbie es una joven de origen latino que conduce por Nuevo México huyendo de sus propios problemas. Con la excusa de una infracción de tráfico, el sheriff Bilstein inicia una persecución sistemática. Más tarde Bobbie se da cuenta que utiliza su placa para aprovecharse de otras mujeres jóvenes vulnerables.

Título original: Blood Star

Año: 2024

Duración: 97 min.

País: Reino Unido

Director: Lawrence Jacomelli

Guion: Lawrence Jacomelli, George Kelly, Victoria Hinks Taylor

Música: Felix Lindsell-Hales

Fotografía: Pascal Combes-Knoke

Reparto: Britni Camacho, John Schwab, Sydney Brumfield


Espectacular explosión final.

De psicópatas, asesinos en serie y gentuza de similar calaña tenemos infinidad de ejemplos cinematográficos. Da igual que sean de clase alta, baja, fontaneros, ingenieros o policías. Y aquí me paro. Blood Star trata de un angelito con la placa de sheriff en el pecho. Esa autoridad no da derecho a todo, pero Bilstein, que así se llama, se lo toma en toda su amplitud. Los motivos de esos comportamientos muchas veces se nos escapan. Es hacer el mal por el mal. ¿Psicópata se nace o se hace? Pregunta complicada. No sé quién apuntaba que el hombre nace bueno. Los acontecimientos posteriores al nacimiento pueden llegar a provocar, en muy pocas ocasiones por suerte, una deriva hacia lo siniestro provocada seguramente por alguna alteración mental.


Lawrence Jacomelli acomete su primera obra como director sin dejarse nada en el tintero. Dibuja unos personajes, especialmente el serial killer, un poco estereotipados, pero con un toque siniestro que tiene su mérito después de ver tantas y tantas cintas de este tipo. Permitirme que nombre una película que se ha convertido con los años en el paradigma de los asesinos en serie, además cuenta con dos al precio de uno. Me estoy refiriendo a El Silencio de los Corderos (The Silence of the Lambs. Jonathan Demme, 1991). Hannibal Lecter ha creado escuela, sin duda.

Bobbie es una joven de origen latino que conduce por Nuevo México huyendo de sus propios problemas. Con la excusa de una infracción de tráfico, el sheriff Bilstein inicia una persecución sistemática. Más tarde Bobbie se da cuenta que utiliza su placa para aprovecharse de otras mujeres jóvenes vulnerables.

En principio parece un déjà vu. Conforme van pasando los minutos comprobamos que la cinta no avanza demasiado, llegando incluso a encontrar toda ella algo insulsa y falta de fuerza. No sé si os acordáis de Downrange (Ryûhei Kitamura, 2017), un film que camina al borde del abismo en cuanto a aburrimiento, pero que al final, y sin que casi no lo esperemos, endereza el timón, acabando de forma magistral. Pues Blood Star es un poco lo mismo. Quizás en esta última no se demore tanto ese relanzamiento, pero el resultado final agradece ese incremento en cuanto a ritmo.


Al ser un survival, asistimos al típico juego del gato y el ratón. Al final, eso ya lo sabemos, ese orden da un vuelco quedándonos a cuadros. Eso es mérito de un buen guion que por adolecer de algo son los un poco manidos diálogos y los posados de los dos actores principales.

Hablando de ellos, nombrarlos, ¿qué menos? Empezamos por una fantástica Britni Camacho (Evil Tapes) que da vida a Bobbie, una chica que pasa de Guatemala a Guatepeor sin quererlo. Acabamos con el televisivo John Schwab como sheriff Bilstein, al cual dota de un punto de mala leche muy eficiente.

Blood Star es una película para pasárselo bien, sin otras perspectivas. Si os molan los survivals salvajes, pasaréis un rato muy divertido. Eso sí, esperad hasta el final.

Firma: Josep M. Luzán.
@Josep_Luzan

🎬 VOD