Título original: Idiot Girls and School Ghost: School Anniversary
Año: 2024
Duración: 90 min.
País: Corea del Sur
Director: Kim Min-ha
Guion: Kim Min-ha
Música: Lee Geon-ho
Fotografía: Yang Hyun-suk
Reparto: Eunseo, Kim Do-yeon, Jeong Ha-dam, Kang Shin-hee, Jeong Ha Dam
Terror demasiado suave.
Hay producciones que juegan a dos bandas. Por una parte, están hechas de la manera más comercial posible, pero el tema que tratan se escapa bastante de lo que el público juvenil o para toda la familia, que parece su público objetivo, demandan. Estamos hablando de terror, más o menos soft. La frontera entre este subgénero puede que la marquen ciertos aspectos como pueden ser fantasmas, aunque estos den menos miedo que un tigre disecado. La trama, al moverse dentro de lo que podríamos llamar high school coreano, condiciona el resto de la historia. Los continuos tics a los comportamientos de gente de esa edad, al principio hacen gracia, pero su repetición acaba siendo plomiza. Tampoco ayudan excesivamente al desarrollo de la historia.
Ji Yeon es una estudiante de último año de secundaria que sueña con convertirse en directora de cine. Intentando superar la nota de corte para entrar en la universidad, se topa con una cinta de video doméstico de 1998. En ella se explica que unos estudiantes que jugaron al escondite con un fantasma obtuvieron calificaciones perfectas en dichos exámenes. Decidida, ella y sus amigas se disponen en la actualidad a jugar al escondite con el fantasma que continúa aún por allí.
Kim Min-ha va a tiro seguro. Su apuesta es bastante comercial y con el público juvenil entre ceja y ceja. Idiot Girls and School Ghost: School Anniversary es de aquellas películas que vas a ver con la novia, a la que no le gusta para nada el terror, esperando que se coja a tu brazo y cuando la miras ves que se ha quedado dormida.
Técnicamente está muy bien rodada y el fantasma de turno tiene su qué. Lo que chirría un poco es el repetitivo guion, obra también de Kim Min-ha. Las escenas se repiten una y otra vez, sin aportar muchas novedades con lo que parece que siempre estamos viendo lo mismo. A pesar de esto, las interpretaciones salvan algo los muebles, destacando de entre ellas a Kim Do-yeon, especialista en films románticos, que parece ser la líder del grupo, aunque tampoco queda muy claro. En cuanto a los efectos especiales, son bastante escasos, aunque cumplen para poder catalogarla como película de terror.
Naturalmente esta cinta tiene su público, aquel al que no le gustan los sobresaltos excesivos y que pueda reírse con los chistes, muy coreanos, por cierto, que van apareciendo. La manifestación de algunas chamanas y la mezcla de religiones es bastante acertada ya que dan una visión de la Corea del Sur actual.
Vamos acabando ya. Suponemos que no sois coreanos, así que armaos de paciencia si habéis elegido esta película. Puede ser que la disfrutéis, aunque dudo que lleguéis a entrar en éxtasis. Creo que estáis hechos de otra pasta, pero ya se sabe, para gustos los colores.
Firma: Josep M. Luzán.
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