Sitges - Confession review

Dos hombres luchan por su supervivencia en medio de la nada. Uno de ellos le cuenta al otro un terrible y oscuro secreto que los afecta a ambos. Esa lucha por salir con vida desencadena otra más real y cruenta.

Título original: Confession

Año: 2024

Duración: 74 min.

País: Japón

Director: Nobuhiro Yamashita

Guion: Shuji Yuki, Ryo Takada

Fotografía: Shinya Kimura

Reparto: Yang Ik-joon, Tôma Ikuta

Un gato y un ratón dentro de una cabaña.

Al ver Confession nos llega a la mente la coreana I Saw the Devil (Kim Jee-woon, 2010), de la cual es cercana y lejana al mismo tiempo. Como es natural hay bastantes diferencias entre ellas pero, la trama principal se mueve por esos derroteros. Una sucia y retorcida venganza, dos personalidades contrapuestas y violencia, mucha violencia. Confession tiene la particularidad de que está rodada en una sola localización, una cabaña perdida en un entorno nevado, de la cual los protagonistas no pueden salir. Esa sensación claustrofóbica eleva todavía más esa relación malsana.

Dos hombres luchan por su supervivencia en medio de la nada. Uno de ellos le cuenta al otro un terrible y oscuro secreto que los afecta a ambos. Esa lucha por salir con vida desencadena otra más real y cruenta.

Nobuhiro Yamashita es un director japonés bastante peculiar. En su filmografía podemos encontrar animación, comedias románticas y productos para televisión. Sin extendernos mucho, podemos considerar Confession su incursión más perturbadora que, lo ignoramos, parece que beba de la que hemos comentado al empezar. La influencia de la misma en el cine oriental es bastante extensa. Por poner un ejemplo citaremos la india Pshyco Raman (Anurag Kashyap, 2016). Como veis un amplio espectro de un film, I Saw the Devil, que marcó época y, creemos seguirá teniendo recreaciones de un tema que es bastante universal, la venganza.

El guion, obra de Shuji Yuki y Ryo Takada pone en escena el viejo juego del gato y el ratón. En esta ocasión reducido a la mínima expresión en cuanto a localizaciones, pero bueno, en el fondo es lo mismo. Tiene el mérito que mover a los dos únicos personajes en un entorno muy reducido, con lo que los recursos cinematográficos se ven minimizados estando aprovechados al máximo. La historia, por pequeña que sea, se va desarrollando de manera magistral sin escatimar un giro de tuerca casi al final. Buena historia, acción y violencia en sus escasos setenta y cuatro minutos. Una gozada para los que les guste la concreción.

La dirección es firme y concisa. Sin concesiones que se dice. Se antoja una preproducción ardua ya que el espacio en el que se mueven es escasísimo y los actores tienen que ser conscientes de ello ya que con unas grandes coreografías consiguen dar una amplitud que en realidad no existe.

Los actores que intervienen no son muy conocidos entres nosotros, pero los tenemos que nombrar para destacar su trabajo. Estamos hablando de Yang Ik-joon y Tôma Ikuta. Su performance es de destacar ya que no sabemos a ciencia cierta quién es el gato y quién el ratón.

Confession es una película ideal para los que busquen algo ligero, de calidad y que logre que paséis un gran rato. No busquéis nada más. Es lo bueno y quizás lo malo de la concreción.

Firma: Josep M. Luzán.
@Josep_Luzan

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