Descansa En Paz review

En este abrasador día de verano, tras unas extrañas fluctuaciones eléctricas, los muertos vuelven a la vida. Anna podrá volver a tener en brazos a su difunto hijo, muerto aun siendo un niño, David y su familia podrán reencontrarse con la matriarca fallecida a causa de un derrame cerebral, y Elisabet podrá tener junto a sí al amor de su vida, a quien acaba de dejar en la funeraria.

Título original: Håndtering av udøde

Año: 2023

Duración: 97 min.

País: Noruega

Director: Thea Hvisthendal

Guion: Thea Hvisthendal (basado en la novela de John Ajvide Linqvist)

Música: Peter Raeburn

Fotografía: Pal Ulvik Rokseth

Reparto: Renate Reinsve, Anders Danielsen Lie, Baha Pars, Bjonr Sundquist, Bente Borsun


Los apacibles zombies noruegos.

El nombre del escritor sueco John Ajvide Linqvist alcanzó su lugar en la memoria de los fans del género cuando Tomas Alfredson estrenó Déjame Entrar, años después el director Ali Abassi cimentó aún más el nombre del escritor con Border.

Ahora la directora Thea Hvisthendal se anima con la aproximación de Linqvist al mundo zombie… ¿Será cierto que no hay dos sin tres o será que a la tercera fue la vencida?


En este abrasador día de verano, tras unas extrañas fluctuaciones eléctricas, los muertos vuelven a la vida.

Anna podrá volver a tener en brazos a su difunto hijo, muerto aun siendo un niño, David y su familia podrán reencontrarse con la matriarca fallecida a causa de un derrame cerebral, y Elisabet podrá tener junto a sí al amor de su vida, a quien acaba de dejar en la funeraria.

Tres familias se verán atrapadas en algo que parecería un sueño – el regreso de los seres queridos – si no fuera porque más bien se parece a una pesadilla.

Al igual que ocurrió con el mito vampírico en la novela que le lanzó a la fama – y puede que la película de Alfredson tenga más peso en esto que la calidad narrativa - John Ajvide Linqvist intentó reformular el concepto de los zombis desde un punto menos terrorífico y más realista al contar cómo las familias tenían que hacerse cargo de los seres queridos regresados y el gobierno se encontraba desbordado tanto legal, judicial y legalmente. Thea Hvisthendal, también autora del guion, tira la novela a la basura y reescribe tanto la historia como los personajes para contar lo que a ella la interesa: qué lenta crece la hierba en Noruega; no, perdón: volver a encontrarse con los seres queridos muertos puede ayudar a cerrar heridas, o por lo menos esto de los zombis ayuda a parafrasear a Shakespeare con “algo huele a (zombi) podrido en Noruega”.


Hvisthendal tensa la cuerda de la paciencia con un estilo exasperadamente lento y cuando el renacimiento de los muertos tiene lugar en el minuto cincuenta y solo quedan cuarenta minutos, el espectador se dice “bueno, ahora empezará la historia”… No, porque Thea Hvisthendal insiste en su plan de ver crecer la hierba noruega. Los personajes humanos también parecen zombis ya que son gente que mira al infinito como si algo le pasara por la cabeza, pero lo único que pasa en Descansa En Paz es el tiempo y cuando termina la historia – aunque sería injusto no reconocer que en el minuto 82 tiene lugar una potentísima secuencia que se agarra al espectador e incluso retoma elementos de la novela de John Ajvide Linqvist – lo único que se ha visto es cómo crece la hierba acompañado por la hermosa música de Peter Raeburn.

Realmente a la tercera va a la vencida y Descansa En Paz no alcanzará el estatus o resonancia de Border o Déjame Entrar al ser recomendable solo para los fans de películas contemplativas, aquellos que no gusten el cine de terror y, especialmente, los curiosos que quieren saber cómo crece la hierba noruega.

Una fiesta, vamos.

Firma: Javier S. Donate.

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