Título original: Let’s Scare Julie
Año: 2018
Duración: 83 min.
País: Estados Unidos
Director: Jud Cremata
Guion: Jud Cremata
Música: Katishe Buckingham, VVOO
Fotografía: Chuck Ozeas
Reparto: Troy Leigh-Anne Johnson, Isabel May, Odessa A’Zion, Brooke Sorenson
Te gustará o la odiarás.
California: los Beach Boys, tanta gente rubia y bronceada, playas, vigilantes de la ídem… Pero luego rascas un poco y descubres que bajo esta capa de barniz hay moho.
Tras la muerte de su padre, Emma y su hermana Lilly van a vivir a casa de su prima Taylor. Es una noche calurosa, a punto de caer una tormenta y lo mejor que se les ocurre a Taylor y sus insoportables amigas es ir a asustar a Julia, la vecina que se ha mudado a la casa de enfrente. Las consecuencias de esta broma serán terribles.
Antes de hacer la review me gusta indagar sobre los autores, actores y cuál ha sido la recepción de la película en cuestión. Ante Let’s Scare Julie están los dos polos: aquellos que la acusan de aburrida debido a la escasez de talento, y otros que la suben a los altares del séptimo arte. Me encuentro en un término medio aunque creo que todos los que la tildan de aburrida es porque no terminaron de comprender lo que es Let’s Scare Julie: una historia clásica de fantasmas mezclada con el toque de subnormalidad (perdón por la palabra pero es la que mejor se ajusta) de los adolescentes que retroalimentan sus tonterías.
Los brevísimos títulos de crédito de Let’s Scare Julie me robaron el corazón con ese aire a los años setenta y el homenaje a Saul Bass, luego tiene lugar la travesía por el desierto, cuando conocemos a los personajes pero – al igual que Host de Rob Savage, una película con la que tiene muchos puntos en común – nos encontramos con una historia contada “supuestamente” en tiempo real que va tomando velocidad. No puedo decir que me caigan bien los personajes de Let’s Scare Julie, incluso alguno me resulta asqueroso, pero esta película – que en el fondo trata de la supremacía entre blancos y negros, listos y tontos, poderosos y tímidos – retrata a la perfección a unas niñas de clase media que no reparan en los actos que cometen para no aburrirse; y con esto vuelvo a Host: el aburrimiento es mal compañero de asuntos sobrenaturales.
Entiendo que la película de Jud Cremata despierte tan poco interés, y por qué es una cinta arriesgada a todas luces, pero más allá de esto me encontré una película de atmosfera enfermiza que va a más, con guiños a Blair Witch Project y Paranormal Activity, que utiliza sabiamente los recursos que tiene y cuyo último tercio es agobiante aunque la revelación final resulta apresurada para el peso que tiene.
Ninguna actuación sobresale ni queda por debajo, tal vez hablar de Troy Leigh-Anne Johnson por ser el eje de la película, y añadir que Odessa A’Zion consigue ser muy odiosa.
Let’s Scare Julie es una apuesta arriesgada y, por ello, no voy a jugármela respecto a qué te parecerá.
Dale al play y saldremos de dudas.
Firma: Javier S. Donate.
🎬 VOD
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