Halloween Party review

Charlotte es asesinada en extrañas circunstancias y pocos días después Grace, su mejor amiga, recuerda que ese mismo día ambas recibieron un extraño mensaje en el que se les preguntaba su mayor miedo. Ella cree que ese mensaje es la clave del asesinato de Charlotte y, con la ayuda de Bubbles, un informático, intentará resolver el enigma de todo aquello.

Título original: Halloween Party

Año: 2018

Duración: 92 min.

País: Estados Unidos

Director: Jay Dahl

Guion: Jay Dahl

Fotografía: Kyle Cameron

Reparto: Amy Groening, Zack Faye, Lisa Hackett, Taylor Olson, Shelley Thompson, Jason Daley, Marletta Laan, Thomas Niles, Devon Taylor

Investigación, jump scares y poco más.

Los creepypastas son historias de terror que se han distribuido por circuitos virtuales. A la práctica son las clásicas leyendas urbanas como la chica de la curva o el hombre del saco pero adaptadas a los nuevos tiempos y, mediante redes sociales y similares, dan la vuelta al mundo varias veces antes de siquiera que te enteres de que existe e inmediatamente se vuelven virales. Halloween Party bebe mucho de este mundo e intenta crear una historia original que perfectamente cabría dentro del significado creepypasta, el problema radica en la palabra “original”.

Charlotte es asesinada en extrañas circunstancias y pocos días después Grace, su mejor amiga, recuerda que ese mismo día ambas recibieron un extraño mensaje en el que se les preguntaba su mayor miedo. Ella cree que ese mensaje es la clave del asesinato de Charlotte y, con la ayuda de Bubbles, un informático, intentará resolver el enigma de todo aquello.

Una vez la historia se desarrolla ves como su parecido con The Ring (Hideo Nakata, 1998) es escandaloso, sigue tramo por tramo el argumento de aquella sin demasiado pudor, y salvo algunas pequeñas variaciones las dos van en caminos paralelos. Llegados a un punto, ya para el final de la cinta, Halloween Party cambia de dirección y se vuelve una copia de [REC] (Jaume Balagueró, Paco Plaza, 2007), y no digo que el found footage lo inventara esa película pero todo el contexto que rodea la película recuerda fuertemente a la película española. Aun así la película no es un desastre, no será para nada lo mejor que verás este mes pero durante la hora y media que dura no perderás demasiadas veces la atención, aunque sea para ver hacia dónde va una trama que no tiene demasiado sentido.

Dirige y escribe Jay Dahl (There are Monsters, 2013). En las escenas de terror logra hacer un buen trabajo manteniendo la tensión pero en todas las ocasiones (en todas) lo resuelve con jump scares mal colocados y sin rubor en ponerlos por todas partes. Además las escenas en las que alguien muere jamás aparece en pantalla, tan solo que es atacado por alguien y posteriormente vemos su cadáver (a veces ni eso) por lo que deja en un estado de insatisfacción que no se resolverá. Además hay algunos planos de transición con errores de raccord en multitud de escenas. En temas técnicos también tiene algunos problemas con el sonido, hay escenas en los que se nota el corte de voz en una misma escena que no ayuda a quitar la idea de que se está viendo algo amateur. La pareja protagonista interpretada por Amy Groening (The Void, Teen Lust) y Zach Faye y su química es lo mejor de la película, que sin ser algo que guíe a la trama, sí que está bien reflejada su relación en pantalla.

La película no es un desastre pero tiene varios problemas, pasando por sus similitudes a varias película algo sospechosas y algunos problemas en la dirección. Si eres un fan de películas de terror, con gente deforme y algo de investigación pues puedes darle una oportunidad.

Firma: Oriol Hernández.
@Oriol_TW