Título original: Drogówka
Año: 2013
Duración: 118 min.
País: Polonia
Director: Wojciech Smarzowski
Guión: Wojciech Smarzowski
Música: Mikolaj Trzaska
Fotografía: Piotr Sobocinski Jr.
Reparto: Bartlomiej Topa, Arkadiusz Jakubik, Julia Kijowska, Eryk Lubos, Robert Wabich, Jacek Braciak
¡Sorprendente e intensa!
El cuerpo de policía de tráfico es corrupto, asuntos internos presiona e investiga para tratar de cambiar malas acciones, cuando uno de los agentes aparezca muerto lo cambiara todo.
Esta producción polaca podría ser un reflejo de aquellas policías corruptas de algunos países del continente europeo, donde la política del soborno esta a la orden del día, especialmente en los agentes de tráfico que son quienes se ocupan de multar a pie de calle a los ciudadanos.
No obstante, no solo se habla de sobornos, sino también de una manera de hacer ortodoxa e ilegal donde parece no haber ni leyes ni línea prohibida que no cruzar.
Todo ello se hace en un marco de thriller policíaco con toques de humor negro, con un final de film al más puro estilo fugitivo. Ritmo trepidante, donde hay que estar bien atentos para no perder el hilo de la historia ni a sus protagonistas surrealistas, donde individualmente son un mundo propio que explotar.
El director y guionista de la obra es Wojciech Smarzowski, que cámara en mano aporta el ritmo a la película que el guión que el mismo ha escrito exige, sin duda alguna, el ritmo y las sorprendentes situaciones que se originan generando cambios de acontecimientos a cada momento son el éxito de esta recomendable y particular película.
El actor principal es Bartlomiej Topa, que ya colaboró con este director en los títulos The Wedding y The Dark House, se muestra desenvuelto y caracterizado con la cabeza afeitada al cero en un papel que parece escrito para este actor, tras finalizar el film, no puedes ponerle otra cara a este papel.
Completan el reparto Arkadiusz Jakubik, un mujeriego sin freno que regalará situaciones muy cómicas al film, Julia Kijowska una de las pocas féminas del cuerpo de policía de tráfico y Eryk Lubos, racista, alcohólico y malhumorado.
Como particularidad, y como detalle a observar, ya que dentro del caos y corrupción generalizado de la película puede pasar fácilmente por alto, mencionar que la película tiene un protagonista principal claro, un policía, pero le rodean en pantalla varios compañeros de trabajo más, todos ellos, representan los siete pecados capitales, una curiosidad bien pensada a la hora de desarrollar el thriller.
Europea, interesante y con golpes brillantes!
Firma: Gerard FM.
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