Alfred Hitchcock
Charles McGraw
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Jessica Tandy
Los pájaros
Phenomena Experience
Reviews
Rod Taylor
Suzanne Pleshette
The Birds
Veronica Cartwright
Los Pájaros review
Título original: The Birds
Año: 1963
Duración: 115 min.
País: Estados Unidos
Director: Alfred Hitchcock
Guión: Evan Hunter (Basado en: Daphne Du Maurier)
Música: Bernard Herrmann
Fotografía: Robert Burks
Reparto: Tippi Hedren, Rod Taylor, Jessica Tandy, Suzanne Pleshette, Veronica Cartwright, Ethel Griffies, Charles McGraw, Doreen Lang, Ruth McDevitt, Joe Mantell, Alfred Hitchcock
Puede producir ornitofobia.
Cuando a uno le proponen escribir una review de una película de hace más de medio siglo, uno se pregunta- ¿Qué puedo decir yo que no se haya dicho todavía?-. Pero la cosa se complica aún más si dicha película es una de las joyas del maestro del cine de suspense, Alfred Hitchcock.
Podemos encontrar documentales donde se nos cuenta detalles sobre cómo fue rodada y el arduo trabajo que hay detrás de este tratado sobre ornitología. Artículos comentándonos curiosidades tales como que la idea del relato orinal, surge de unos hechos reales en California, e incluso parodias, y es normal pues cincuenta y un años dan para mucho.
Pero a pesar de esto, y más allá de contener escenas que forman parte de la historia del cine, que aunque no se haya visto la película, casi todo el mundo es capaz de reconocer, hay una muy buena película de casi dos horas que no se debe dejar pasar.
Melanie Daniels es la hija del dueño de un poderoso periódico de San Francisco. Una joven adinerada sin muchos quehaceres y con una turbia fama de liberal. Una mañana en una pajarería local conoce a Mitch Brenner, un reputado abogado que no tiene muy buena imagen de ella por un encuentro anterior. Después de una animada conversación sobre aves voladoras y cierto intercambio de impresiones, Melanie decide comprar dos tórtolas, objeto que pretendía nuestro protagonista, y partir hacia el pequeño pueblo pesquero donde Mitch pasa los fines de semana con la intención de conocer algo más a este atractivo abogado. Pero una vez en Bahía Bodega, el fin de semana romántico acaba volviéndose una pesadilla debido al extraño comportamiento de las aves autóctonas.
Estupenda película del perfil más famoso de la historia del cine, Alfred Hitchcock, de la época cercana al zenit de su carrera, pero no por ello desmerecedora de estar dentro de una de sus grandes obras. Lo que comienza siendo poco más que una comedia romántica, un tanto atípica, sobre todo si nos situamos en el contexto histórico, porque es ella quien persigue a él y no a la inversa, se acaba convirtiendo un una excelente decálogo de cómo provocar miedo. Cambios de volumen adecuados, chillidos mezclados con graznidos que recordareis durante mucho tiempo, actores que bordan la expresión de pavor... No volveréis a mirar a las gaviotas de la misma forma.
Si bien es cierto, como advertencia, más que como crítica, que puede costar un poco de ver sobre todo a aquellos menos asiduos al cine clásico y más acostumbrados a los tiempos vertiginosos que se manejan hoy en día. No hemos de olvidar el salto temporal, y por ello tener en cuenta que esta película es como una buena comida, se cocina a fuego lento y con cariño, con delicadeza, añadiendo los ingredientes en su momento exacto, hasta que llega el momento de servirla y presentarla donde todo cambia.
En cuanto a los actores, y aunque todos lo bordan, destacar un nombre propio Tippi Hedren, que desde que aparece con su histórico vestido pistacho enamora a la pantalla siendo el brillante foco que ilumina y que lo sigue haciendo incluso llena de heridas y catatónica. En casi todo momento es ella quien domina la situación dejando a Rod Taylor (Mitch) en un segundo plano hasta cerca del final donde por fuerzas mayores se ve forzado a tomar el mando y demostrar que también participa en el film.
Estupenda película, entre las básicas a ver cuando de Hichtcock se trata, pero que también tiene un lugar especial en la historia del cine y que ningún fan del séptimo arte que se precie, debería pasar de largo.
Firma: Daniel Manso.
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