La Horda review

Título original: La Horde

País: Francia

Año: 2009

Duración: 90 min.

Dirección: Yannick Dahan, Benjamin Rocher

Guión: Arnaud Bordas, Stéphane Moissakis, Yannick Dahan, Benjamin Rocher

Producción: Xavier Gens, Raphaël Rocher

Fotografia: Julien Meurice

Musica: Christopher Lennertz

Reparto: Alain Figlarz, Aurélien Recoing, Claude Perron, Eriq Ebouaney, Jean-Pierre Martins, Jo Prestia

Si queréis acción zombi en estado puro esta es vuestra película, la violencia y las imágenes grotescas no dejan de aparecer desde el primer momento. Los zetas son terroríficos, extremadamente fuertes y súper rápidos, no dando ni un respiro a los protagonistas que, a pesar de ser entrenados policías y gangsters armados hasta los dientes, poco pueden hacer para frenar a la horda de muertos vivientes que se dirige hacia ellos con la firme intención de devorarlos vivos.

El guión transcurre directo y sin complicaciones manteniendo un ritmo trepidante que nos hará vibrar durante todo el film, no dando en ningún momento explicación alguna de porque los cadáveres de repente cobran vida. Si unimos todo esto a una fotografía realmente cruda, a unos escenarios oscuros y lúgubres, tenemos servida una hora y media de autentico cine de terror. El trabajo de casting es excelente, con una selección de actores principales magnifica.

Un grupo de policías busca venganza por el asesinato de un compañero del cuerpo a manos de una banda de narcotraficantes. Para ello se introducen de noche en un edificio semi abandonado situado en un suburbio al norte de Paris, en el que está ubicado el cuartel general de los delincuentes. Pronto descubren que algo muy siniestro está pasando cuando sorprendentemente los cadáveres abatidos a balazos echan a andar ávidos de carne humana. Policías y narcos deben unir sus fuerzas para intentar no convertirse en bistecs poco hechos.

Los fanáticos del género zombi, sin duda, disfrutarán mucho viendo esta película ya que cuenta, entre otras cosas, con unas escenas de acción memorables.

Firma: Sergio Bosch.